El aumento constante de las temperaturas y la exposición al sol nos invita a ser más conscientes de los cuidados que debemos tener a la hora de estar en contacto, especialmente en verano, con los rayos UV. Para que no presentemos dificultades, hoy hablaremos de todo aquello que debemos valorar.
Por supuesto que el sol nos ayuda a estar bien tanto física como psicológicamente, pero, es necesario que lo hagamos bajo ciertas precauciones para no resultar afectados.
Observemos todo aquello que es necesario saber.
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¿En qué nos beneficia tomar el sol?
Lo primero que diremos es que el contacto con el sol resulta fundamental en nuestro día a día. Esta es la fuente número 1 de vitamina D y al mismo tiempo, nos ayuda a que nuestros huesos absorban calcio, lo cual permite que estos tengan la fortaleza suficiente conforme avanzamos en la vida.
Pero estos no son los únicos beneficios, además de lo anterior, el sol nos permite:
- Impactar nuestro estado de ánimo.
- Disminuye el efecto de infecciones respiratorias.
- Aumentar la capacidad de trabajo cardiovascular.
- Estimular las diferentes terminaciones nerviosas.
- Mejorar algunas infecciones cutáneas.
- Impactar de forma positiva el colesterol en la sangre.
- Mejorar la respiración.
Por supuesto que este impacto positivo logra darse en nuestro organismo, toda vez que nos expongamos de manera regulada y con la protección recomendada por nuestro médico y según las condiciones de nuestra piel. De lo contrario, se podrán presentar algunas afectaciones, que es justamente de lo que hablaremos a continuación.
¿Cómo nos puede afectar tomar el sol en verano?
Si bien estamos en verano y un poco de sol no nos cae mal, la exposición por largos periodos y sin la protección adecuada nos puede impactar negativamente. Veamos a continuación cuáles son esos puntos que nos puede afectar:
- Lo más habitual son las quemaduras en la piel, que pueden ser leves, moderadas y severas. En este punto debemos tener en cuenta las zonas de nuestro cuerpo que estamos exponiendo de mayor forma, porque de esto también dependerá la gravedad de cada quemadura.
- Dificultades y lesiones oculares.
- Inhibición del sistema inmunitario.
- Manchas en la piel.
- Envejecimiento prematuro de la piel.
- Desarrollo de cáncer de piel, los cuales pueden ser graves o no.
Todos estos aspectos son determinantes para las personas de todas las edades. Pero, en el caso de los niños y adolescentes, es determinante que seamos mucho más precavidos, porque las quemaduras a tempranas edades pueden desarrollar patologías severas a futuro.
Recomendaciones al momento de estar expuestos al sol
Es muy importante que siempre contemos con aquello que nos indica nuestro médico, especialmente porque cada tipo de piel es diferente y los productos con factores protectores varían de una persona a otra. Pero, a nivel general, debemos tener presente lo siguiente:
- Ser precavidos con los horarios en los que nos exponemos al sol. Por lo general, entre las 12 y las 16 horas, son los momentos más fuertes y menos recomendados.
- Aplicarnos protector solar en todo el cuerpo, al menos media hora antes de estar expuestos al sol. Lo ideas es que lo renovemos cada 2 ó 3 horas y que el protector solar sea como mínimo de factor 30.
- Tener cuidado con las cicatrices de menos de 6 meses, lo ideal será no exponerlas al sol.
- Usar otro tipo de protección como ropa, gafas, gorros, sombrillas y demás.
- Mantener una buena hidratación.
- Debemos seguir las indicaciones anteriores sin importar si el día está nublado.
¿Qué medidas tomar con los bebés y los niños pequeños?
Las precauciones con esta población deben ser aún más ajustadas, entre las más importantes tenemos:
- Los bebés con menos de 6 meses no deberán estar en contacto directo con el sol.
- Los menores entre 6 meses y 3 años, debemos cubrirlos con ropa y con gorras, además de usar protectores solar que tenga un factor de protección de 50 FSP o superior.
- Mantenerlos con una correcta hidratación.
- Si están siendo lactados, esto representa una fuente óptima de líquido.
Adeslas Torrelodones
Las salidas en verano son algo frecuente y las altas temperaturas también lo son, por este motivo en ASMC Seguros Torrelodones queremos que las familias estén atentas al cuidado del cuerpo y en especial de la piel, ahora que el sol es el principal protagonista. Así que estamos listos para resolver dudas e inquietudes que surjan y que puedan atender médicos generales o especializadas.
Para mayor información podemos comunicarnos por medio de las siguientes vías:
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En conclusión
El correcto cuidado de la piel resulta determinante para que nuestra salud esté en óptimas condiciones a corto, mediano y largo plazo. Para que esto pueda darse es crucial que sigamos las recomendaciones médicas, que usemos la protección adecuada y que no nos excedamos en el contacto directo con el sol.
Los puntos que acabamos de describir requieren además un seguimiento exhaustivo, en especial cuando se presentan dificultades. Para ello es crucial que contemos con un seguro que nos permita tener una cobertura tanto para nosotros como para los demás miembros de la familia y mucho mejor si es a nivel nacional.
En este caso, tengamos la certeza de contactar con profesionales que nos muestran todo lo que necesitamos y que nos brinden la información completa en cuanto a lugares, características y demás. Recuerda siempre que asegurarse es aprender a ser prevenidos.
